Kveta Pacovská nació en Checoslovaquia en 1928. Pintora, escultora e ilustradora. Se graduó en La Academia de Artes, Arquitectura y Diseño de Praga. Fue profesora en Berlin. Nuevamente nos encontramos con una autora que comienza a ilustrar por acompañar a sus hijos haciendo con ellos algo creativo. Sus libros se han publicado en muchos países y traducido a diferentes idiomas. Recibió el Premio Andersen en 1992.
Como adelanto en el título de la entrada esta interesante autora se caracteriza por su impactante trabajo plástico. Utiliza formas geométricas y colores vivos dándole gran importancia al rojo y a las superficies plateadas. Sus obras tienen un sustrato de austeridad a la vez que muestran una gran libertad en su juego con el color y las formas y en la experimentación con materiales. Son abstractas a la vez que figurativas y siempre modernas, frescas e innovadoras. Ella misma dice que intenta que sus libros sean objetos de arte en papel. Se acerca a los niños con sus imágenes sencillas deliberadamente infantilizadas, aunque sus trabajos tienen la complejidad del adulto que reflexiona sobre lo que hace. El resultado es brillante, original y sofisticado.
Presentaré tres libros trabajados en mi aula. Las ilustraciones, muy coloristas, recuerdan los dibujos infantiles y tienen un encanto especial que cautiva a los niños. Tienen muchos troquelados y ventanitas que resultan muy atractivos para los niños y les facilitan la aceptación de sus propuestas a pesar de la cierta complejidad que a veces tienen sus trabajos.
Requieren que el adulto se implique en la presentación de los libros a los niños, ya que si logra trasmitirles la fuerza plástica de los mismos conseguirá que muchos se entusiasmen con ellos y experimenten con sus propias creaciones. Libros que pueden utilizarse para trabajar el collage en el aula, dándoles formas de colores brillantes y papel plateado recortadas y dejándoles libertad para que compongan sus propias escenas.
“Uno, cinco, muchos”, Kveta Pacovská, Ed. Kókinos. Tiene un toque de interactividad. Es un libro para contar hasta 10 y al combinar colores, texturas, troquelados y solapas llama la atención de los niños y hace que se interesen por los números presentados de esta forma tan nueva y artística. Una propuesta diferente para aprender a contar.
“El pequeño rey de las flores”, Kveta Pacovská, Ed. Kókinos. Este libro, debido a su colorido y la sencillez de los dibujos que recuerdan a los infantiles, llega totalmente a los pequeños que espontáneamente hacen unos dibujos muy semejantes cuando se les pide que reflejen alguna escena. Muy poético, cuenta la historia de un pequeño rey de un país de flores que busca a su princesa. Con ventanitas por las que asoman los personajes dando un tono lúdico a la historia.
Lo cuentan aquí:
Aquí pueden verse algunas de sus ilustraciones:
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